España anunciará en el día de mañana otra ronda de impopulares medidas de austeridad cuando dé a conocer el presupuesto del 2013, pese a que los planes de ajuste ya han impulsado numerosas protestas de los sectores afectados.
Dado que la meta de déficit de presupuesto de este año parece cada vez más difícil de alcanzar, el Gobierno conservador busca alternativas como el dejar de indexar las pensiones por la inflación, fijar impuestos a las transacciones de acciones, «impuestos verdes» sobre emisiones o eliminar exenciones tributarias.
El presupuesto del 2013 es el segundo que ha tenido que pasar el presidente del gobierno, Mariano Rajoy, desde que asumió en diciembre. El mandatario debe persuadir a los socios europeos de España de que puede recortar la brecha presupuestaria en más de 60 mil millones de euros para el 2014.
Rajoy ya ha aprobado recortes de gastos y alzas de impuestos que equivalen a más que dicho monto en los próximos dos años, pero las cifras de mitad de año muestran que la meta de déficit del 2012 se salió de las estimaciones mientras los pronósticos de ingresos tributarios no serán alcanzados debido a la contracción económica.
España está en el centro de la crisis de deuda de la zona euro por el temor a que el Gobierno no pueda controlar sus finanzas, golpeado por la segunda recesión desde el 2009, que ha dejado a uno de cada cuatro trabajadores sin empleo y presionado al alza los costos del endeudamiento.
Las protestas contra los recortes están ganando impulso. Más de mil policías cercaron el Parlamento en Madrid el martes contra los manifestantes que planeaban formar una cadena humana alrededor del edificio.
Cientos de manifestantes se reunieron en diferentes puntos de la capital antes de marchar al Parlamento, diciendo que estaban furiosos porque el Estado ha colocado fondos públicos en los bancos, al tiempo que recorta los beneficios sociales.
Mientras, Rajoy está frenando un pedido de ayuda a Europa, que activaría el programa de compra de bonos del Banco Central Europeo y rebajaría las castigadas primas de deuda del país.
Rajoy dice que evalúa las condiciones del eventual rescate, pero la sospecha del mercado de que podría tener que esperar hasta las elecciones regionales del 21 de octubre presionaron al alza los rendimientos de corto plazo en una subasta el martes.
Quienes si se encuentran PENDIENTES DEL RESCATE
Rajoy está frenando una petición de ayuda a Europa, que activaría el programa de compra de bonos del Banco Central Europeo y rebajaría las castigadas primas de deuda del país.
Además lo que Rajoy dice es que el mismo es quien está estudiando las condiciones del eventual rescate, pero la sospecha del mercado de que podría esperar hasta las elecciones del 21 de octubre en Galicia y País Vasco presionaron al alza los rendimientos de corto plazo en una subasta el martes.
Se espera también que el Gobierno establezca un nuevo calendario de reformas económicas , visto como un intento de adelantarse a las estrictas condiciones impuestas por la UE a la petición de ayuda.
La cifra de déficit de mitad de año indica que las cuentas nacionales ya están en una pendiente que conduce al pedido de un rescate.
No podemos dejar de mencionar que el déficit a finales de junio se situaba por encima del 4,3 por ciento del Producto Interior Bruto, incluyendo transferencias a los bancos rescatados, lo que hace casi imposible alcanzar la meta del 6,3 por ciento para finales de año.