Dadas las circunstancias económicas en las que se encuentra actualmente el país, el plan Renove para impulsar al sector automovilístico, cobra más relevancia que otros años. Veamos las claves de este plan para 2020.
Entre todas las medidas propuestas, podemos encontrar unas creadas especialmente para incentivar la compra de los vehículos. De esta manera, si deseamos comprar un coche, esta nueva medida contempla facilitar una ayuda de entre 400 y 4.000 euros a usuarios particulares.
Esta ayuda estará disponible tanto para coches con modelo de mecánica alternativa, como es el caso de un coche eléctrico o de un híbrido, pero también para coches de combustión. De hecho, lo que se pretende a través de esta medida, es que la gente se muestre más interesada y tenga más accesibilidad a los coches de mecánica alternativa, que a día de hoy están ganando un terreno importante respecto a los coches de combustión convencionales.
Este tipo de ayuda en concreto, está dotado de un total de 230 millones de euros para llevarse a cabo, y su periodo de duración se mantendrá vigente hasta finalizar el año. Como ya hemos mencionado anteriormente, tiene como objetivo principal la renovación del parque de vehículos, cuya antigüedad media ronda los 12,7 años.
Por otro lado, se trata de una manera de ofrecer acceso a más usuarios para que puedan adquirir un vehículo completamente nuevo, puesto que el mercado de la venta de vehículos de segunda mano está creciendo rápidamente. En la última década, la venta de vehículos de más de 20 años ha aumentado hasta un 18%.
El sector del automovil ante la crisis del coronavirus
El sector del automóvil ha sido uno de los grandes afectados por la crisis económica del Covid-19. A lo largo de marzo, abril y mayo, ha obtenido una caída en ventas completamente histórica, y los expertos dan por perdida una pronta recuperación, al menos durante lo que queda de año.
Además, es importante destacar que este tipo de ayudas son totalmente independiente del plan MOVES 2020, que se centra especialmente en la compra de coches eléctricos y alternativos, de cuya gestión será responsable cada comunidad autónoma y que ya se ha puesto en funcionamiento.
Pueden solicitar este tipo de ayuda usuarios particulares, como es el caso de trabajadores por cuenta propia o empresas, que podrán recibir desde un vehículo en el primer caso, hasta incluso 30 en el segundo.
Si queremos obtener este tipo de ayuda, es completamente imprescindible enviar a la chatarra nuestro antiguo vehículo. De esta manera, si se trata de un automóvil convencional, debe tener una antigüedad mínima de 10 años, y si por el contrario se trata de un vehículo comercial ligero, lo mínimo son 7 años de antigüedad.
La ITV debe encontrarse en vigor, y el titular del vehículo debe ser la misma persona que realiza la compra del nuevo vehículo. Si esto no fuera posible, también tiene derecho a realizar la compra el beneficiario de un familiar de primer grado, al menos durante un año, para evitar posibles distorsiones en el mercado de segunda mano.