Las últimas cifras de las tasas de desempleo en la UE, son del pasado mes de julio. En ellos, podemos ver que la tasa de desempleo ha bajado hasta el 11,1%, desde su máximo del 12,1% que tuviera el pasado abril del año 2013. A pesar de ser esta una buena noticia, es el paro de larga duración , es decir aquel en el que los parados están en esta situación más de 12 meses, el principal problema en lo que a esto se refiere.
Son 19 millones los europeos que están sin trabajo, y más de la mitad los que no han trabajado en el último años. Y más de un 15% los que no han trabajo en los últimos 4 años. El problema más grave es en el sur de Europa, países como España, Italia, o Portugal. Pero lo sorprendente es, que por ejemplo en EEUU el número de personas que lleva tiempo sin encontrar empleo, ha descendido; es decir que la tasa de empleo ha largo plazo se ha recuperado. ¿Por qué es tan difícil volver a trabajar?
Parte de la razón radica en la movilidad laboral. Casi el 30% de los estadounidenses residen en un estado diferente de aquel en el que nacieron. Pero un mero 2,8% de los europeos se han trasladado a otro país de la UE. Las barreras del idioma, las diferencias culturales y las cualificaciones no transferibles hacen que sea mucho más difícil encontrar un nuevo trabajo.
Las generosas prestaciones por desempleo en Europa, también vinculan a los posibles trabajadores a un lugar y hacer que el trabajo sea algo cada vez menos urgente de conseguir. En la mayoría de los estados americanos, los trabajadores desempleados tienen sólo 26 semanas de ayudas por desempleo. Muchos países de la zona euro apoyan el paro durante más de un año.
Otro factor que influye en las tasas de desempleo a largo plazo, es una rotación laboral más alta en Estados Unidos que en Europa. Según la Organización Internacional del Trabajo,entre 2008 y 2012, la probabilidad de pasar a tener empleo en el próximo mes fue de alrededor de 7% de los europeos y el 12% para los estadounidenses. Y las posibilidades de perder su trabajo en el próximo mes fue de 0,8% y 1%, respectivamente.