Muchas de las empresas más conocidas a nivel internacional, deciden pagar sus impuestos en países donde puedan ahorrarse unos cuántos miles de millones. Pero en realidad, los impuestos que pagan en relación a lo que ganas son muy muy pocos. Una de las empresas más conocidas y que más factura del mundo es Google. Esta empresa paga sus impuestos en Irlanda, y paga hasta un 63%. Concretamente 27,7 millones de euros en 2013. y esto supone un 0,16% de todo lo que ingresa a lo largo del año fiscal. Por supuesto, esta recaudación es sólo de Europa.
A pesar de tener este porcentaje tan bajo de ingresos, todo lo demás tiene que utilizarlo para los gastos comunes de cualquier empresas, que como podemos ver son bastante elevados. Mas de 5.000 millones de euros cubren el coste de las ventas totales en Europa de Google. También tenemos los gastos administrativos, que alcanzan los 11,7 millones de euros. Google Irlanda tiene un beneficio final de 200 millones de euros antes de impuestos, por lo que paga 27,7 millones por los impuestos, sin duda una cifra más que considerable.
Y con estos rendimientos tan bajos para una empresa de estas dimensiones, ¿como consigue llegar a crecer tanto?
El beneficio va a una segunda entidad Google registrada en Irlanda: Google Ireland Holdings, cuyos directores son, según Bloomberg, dos abogados y un gerente de un bufete de abogados de Hamilton, Bermudas. Google Irlanda envía el dinero a Google Holanda Holdings, que también recibe dinero de Google Singapur. Los Países Bajos tienen una aplicación de retenciones a cuenta de impuestos sobre los intereses devengados por la tesorería de las empresas en sus diferentes cuentas bancarias en el ámbito internacional. Google Holanda envía todo el dinero a Google Ireland Holdings-una segunda compañía registrada en Irlanda, pero residente fiscal en Bermudas.
Los números para otros países europeos son aún más bajos. Google también presentó sus cifras del Reino Unido, donde se pagó £ 20.4 millones ($ 34.6 millones) en impuestos sobre ingresos de $ 5,6 mil millones. La compañía se ha enfrentado a muchas críticas por sus estructuras tributarias.
Sin embargo, no es el único que hace esto. Apple utiliza una estructura fiscal similar, al igual que varias otras empresas con su sede europea en Irlanda. Pero todo indica que algunos países europeos no van a tolerarlo mucho más tiempo. Francia se encuentra en medio de la investigación de Google por incumplimiento de impuestos, y la propia Irlanda está considerando reformas fiscales.